Por qué es tan difícil conseguir la atención de los adolescentes
Publicado el 22 de Noviembre de 2018 | Conocimiento

La atención es la capacidad de poner nuestra conciencia en algo determinado y aunque es una habilidad que se puede entrenar, por lo general funciona de manera involuntaria. Tanto nuestro cerebro, como el de los adolescentes, pasa por un proceso complejo para decidir qué información del mundo exterior merece atención y cual descartar.
Los padres se quejan de que los adolescentes no les hacen caso, sin embargo, es habitual que ellos tampoco dediquen toda su atención cuando les hablan. La escena se repite en multitud de hogares, el padre o la madre está fregando los platos de la cena mientras dice sin girarse: “es hora de apagar la consola”.
Se estima que padres e hijos pasan tan sólo un 16 por ciento del tiempo juntos y lo hacen en su mayoría, ingnorándose los unos a los otros. Mientras tanto, ordenadores, tablets y teléfonos insisten sin parar parar obtener nuestra atención de forma que whatsapp, Instagram e incluso el correo electrónico ganan la competición por nuestro interés. Los expertos aseguran que incluso manteniendo el teléfono apagado este ocupa un espacio cerebral importante, pues continuamos preocupados por el hecho de los mensajes que podrían estar llegando y no podemos ver.
Las nuevas tecnologías afectan tanto a los padres, como a los hijos. Tratar de dirigir a un niño cuando somos nosotros mismos los que estamos sumergidos en la multitarea hace más probable que no seamos tomados en serio.
¿Quieres que un adolescente se tome en serio lo que le pides?
Acércate, di su nombre, dale el mensaje y pídele que lo repita. Puede parecer ridículo, pero al repetir las instrucciones, nos aseguramos de que ha comprendido lo que debe hacer. Sé selectivo con las instrucciones y si son ignoradas, implemente rápidamente las consecuencias sin discutir ni advertir reptidamente.
Por Lucía García
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