4 datos importantes sobre la pandemia
Publicado el 16 de Junio de 2020 | Biología y Geología

Desde la aparición de los primeros casos en China, la información sobre el coronavirus ha crecido exponencialmente aunque gran parte ha tenido que ser corregida o matizada posteriormente. Por ello, y ante la importancia de tener claros algunos conceptos básicos de biología sobre este tema, estos son los cuatro puntos clave sobre la enfermedad:
1.- ¿Cuál es el nombre de la enfermedad?
El nombre del virus causante de la pandemia actual es SARS-CoV-2 y la enfermedad que produce se llama COVID-19. En parte el nombre del virus viene de su parecido con el SARS, patógeno que causó una pandemia con varios miles de casos en el 2002. Eso sí, popularmente al SARS-CoV-2 se le llama coronavirus ya que es un virus de la familia de los coronavirus. En nombre de estos virus viene de las estructuras con forma similar a una corona que tienen en su superficie vírica.
2.- ¿De dónde viene el virus?
Los estudios filogenéticos han permitido determinar que el virus más cercano al SARS-CoV-2 es un coronavirus presente en una familia de murciélagos. Se ha encontrado un 96% de identidad entre el SARS-CoV-2 y un coronavirus de murciélago. Sin embargo, es importante recordar que un 4-5% de diferencia genética puede ser mucho; un claro ejemplo de esto es que nuestro genoma y el de los chimpancés se parecen en aproximadamente un 95%.
Aunque todavía es objeto de estudio, la llegada del virus a los seres humanos se cree que se produjo por el consumo de carne de pangolines, que funcionarían como un hospedador intermedio entre humanos y murciélagos ya que a los pangolines les habría llegado el virus desde los murciélagos. Por lo tanto, la aparición del virus se debe a una zoonosis, proceso de paso de una enfermedad natural en los animales al ser humano.
3.- ¿Cómo se contagia?
La fuente principal de contagio es por vía aérea mediante pequeñas gotas expulsadas con la tos o el estornudo, así como tocarse mucosas, boca u ojos con manos contaminados por estas gotas. Pese a que inicialmente se creía que el virus únicamente se transmitía en gotas de mediano tamaño, actualmente se cree que también puede propagarse por gotas de menor tamaño que pueden quedar suspendidas en el aire. Esto hace que las posibilidades de contagio sean mayores en espacios cerrados que en lugares al aire libre.
4.- ¿Si paso la enfermedad soy inmune?
A día de hoy no se sabe con seguridad si haber pasado la enfermedad protege significativamente contra futuras infecciones. Sabemos que los contagiados desarrollan una cierta respuesta inmune contra el virus, pero todavía se desconoce la fuerza y duración de esa respuesta a corto, medio y largo plazo tras pasar la infección. Esto es clave porque para adquirir inmunidad contra un patógeno no solo hay que desarrollar una respuesta inmune contra el virus, también es esencial que esta respuesta sea fuerte y duradera a lo largo del tiempo. Esta incógnita, junto con el bajo porcentaje de población infectada (en España se sitúa en torno al 5%), indican que estamos todavía muy lejos de conseguir una inmunidad de grupo y hacen que el peligro de una segunda ola de contagios sea algo muy a tener en cuenta. En este contexto, seguir las normas de distanciamiento social, uso de mascarillas, higiene de manos, etc. es clave para mantener controlada la expansión del SARS-CoV-2.
Por Pablo Barrecheguren
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