Imita a las máquinas
Publicado el 21 de Junio de 2022 | Matemáticas

Imitar a las máquinas. Ese fue el sueño de Alan Mathison Turing, (Londres, 23 de junio de 1912- Cheshire, 7 de junio de 1954), fue un matemático, lógico, informático teórico, criptógrafo, filósofo, biólogo teórico, maratoniano y corredor de ultradistancia británico. La genialidad de Turing estuvo en modificar la pregunta original de si las máquinas pueden pensar por una muy diferente: “¿Puede un humano diferenciar a un hombre de una máquina?”
Estamos en la era de la Inteligencia Artificial, el mundo de los próximos 30 años será muy diferente al que conocemos, en todos los niveles, en lo laboral, económico, social, TODO. Somos tan egocéntricos los humanos, que pensamos que cualquier inteligencia tiene que ser comparada con la nuestra. Por eso a esta se le llama Artificial, porque la nuestra es la real, somos el realfood en el terreno del conocimiento. Esto ya lo vio venir Alan Turing, otro gran matemático (con un final muy triste, por cierto). Y Claude Shannon es reconocido por haber fundado el campo de la teoría de la información con la publicación Una teoría matemática de la comunicación, que supuso un hito en 1948. Es quizás igualmente conocido por haber sentado las bases de la teoría del diseño de circuitos digitales en 1937, con apenas 21 años de edad. Shannon contribuyó asimismo al campo del criptoanálisis para la defensa de Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial, con trabajos sobre el descifrado de códigos y la seguridad en las telecomunicaciones. Turing ideó un Test, el Test de Turing (somos originales con los nombres, efectivamente), una prueba que evalúa si alguien tiene inteligencia humana o artificial, según lo identifique el interlocutor. Vamos, que somos lo que otros piensan de nosotros (como en Instagram). Es un Test no muy formal, un test homólogo al test de empatía que propuso la novela de ficción “¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?” de Philip K. Dick, adaptada al cine con la celebérrima “Blade Runner”, a la podríamos dedicar tres o cuatro post enteros (digamos π posts).
En cálculo, en velocidad y en precisión, los ordenadores nos superan de muchísimo. Cada vez entendemos más cómo funciona el cerebro humano, estamos más cerca de imitar al ser humano, pero hay algo que las máquinas están muy lejos de hacer: resolver ciertos problemas que requieren de la creatividad y la transversalidad propia de un ser humano. ¿Estáis preparados para ser propiamente humanos? Pues las matemáticas y vuestra originalidad lo pueden conseguir… Que no os confundan con un androide.
Aplicación en el aula
PRUEBA 1 - ¿De qué manera puedes hacer que el 19 para que quitándole uno, le quedaran 20?
PRUEBA 2 – Lee esta frase: L05 NUM3R05 PU3D3N U71L1Z4R5E C0M0 L37R45, Y L4 FR45 R35UL74NT PU3D 53R L1D4 51N MUCH0 5FU3RZ0
PRUEBA 3 – Sigue esta sucesión: 111, 213, 141, 516, …
Soluciones: PRUEBA 1 – En números romanos PRUEBA 2 – ¿Fácil, no? “Los números pueden utilizarse como letras, y la frase resultante puede ser leída sin mucho esfuerzo”. PRUEBA 3 – 171, 819… Estamos contando números en parejas “11, 12, 13,…”
Por Santiago García
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