Coger aire para completar el trimestre
Publicado el 4 de Octubre de 2018 | Conocimiento

Con el mes de septiembre a nuestras espaldas, ya arrancado el curso y metidos de lleno en materia, se puede visualizar cómo será su desarrollo. La lista de cosas por hacer se engrosa cada vez más y es inevitable a veces fijar la vista en el tramo final de la carrera… pero mirar el calendario puede resultar poco esperanzador. ¿Cómo llegar hasta las vacaciones de fin de año sin desfallecer por el camino? Aquí te damos dos consejos para conseguir que esta fase sea más llevadera:
Simplifica
El cansancio a menudo afecta a nuestra comunicación, haciéndola menos eficiente. Ralentizar las instrucciones e intentar ir al grano puede ayudar a cumplir nuestras expectativas, a evitar las repeticiones y a ahorrar energía. En una conversación natural pueden utilizarse entre 130 y 170 palabras por minuto de media. Cuando queremos introducir ideas nuevas o explicar conceptos vitales para la comprensión de los estudiantes debemos adoptar un ritmo más medido. Una buena técnica es elegir palabras clave que pronunciar más lentamente, hacer pausas o pedirles que repitan los puntos clave.
Aligera
Seguramente, ya hayas invertido demasiado tiempo en la planificación. En vez de volver a revisarla, profundiza en tu repertorio educativo y escoge las lecciones que sabes que funcionan y que pueden mantener una atmósfera de concentración. ¿Qué es lo que queremos que aprenda nuestro alumnado? ¿Cuál es la ruta más fácil para que consigan las habilidades que tratamos que demuestren al final del curso?
Las lecciones deben tener una dirección clara. Evaluar dónde y de qué manera estamos invirtiendo nuestro tiempo y nuestra energía evita que se dé lugar al agotamiento. Aligerar la materia de tus lecciones puede ser una vía para que las clases sean más amenas. Por ejemplo, puedes localizar de forma inteligente los PowerPoints elaborados o complejos, o las actividades complicadas. Es bueno ver dónde colocarlas, así tanto nuestro cansancio como el de los estudiantes no se alimentará a lo largo del curso.
Respira profundamente, coge aire, ralentiza tus lecciones e intenta mantener la perspectiva.
Por Marta Seror
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