El impacto positivo de los docentes
Publicado el 18 de Febrero de 2019 | Conocimiento

El trauma puede caracterizarse por varios síntomas: cansancio, desconcentración, irascibilidad, enfado, inquietud o flojera. Puede deslizarse en tu aula cabizbajo o con los brazos cruzados. Puede querer resultar invisible o abalanzarse por la puerta, anunciando un arrebato de energía. ¡Y todo en un solo día! Es un evento agotador y confuso no solo para estudiantes sino también para docentes.
Hablar de trauma significa poseer pocas certezas. Lo que sí se sabe es que la investigación ha demostrado que el trauma infantil que no se llega a tratar tiene consecuencias directas en la vida de los adultos. Varios estudios vinculan los eventos traumáticos de la infancia con rasgos negativos en adultos que incluyen mayores tasas de abandono de la escuela secundaria, obesidad o diversas enfermedades. Para los jóvenes, los eventos traumáticos se traducen en conflicto emocional y disminución del aprendizaje. Por eso es importante adoptar un enfoque proactivo para ayudar tanto a profesores como a alumnos a abordar las conductas que presentan los estudiantes con trauma en nuestras aulas.
Investigaciones recientes muestran que los efectos de un trauma pueden mitigarse. El factor más potente que sustenta esta capacidad es una relación saludable con una persona adulta cuidadosa y atenta. No tiene por qué ser el padre o la madre del joven y, de hecho, a menudo no se trata de alguien del entorno familiar por razones inherentes al trauma. En realidad, una de las figuras que impactan con más frecuencia de manera positiva en los estudiantes con trauma son... ¡los docentes!
Hay que tomarse en serio la influencia que tienen los factores socioemocionales en el aprendizaje y asignar recursos para ayudar a abordar mejor estas necesidades. Es importante involucrar a los educadores en prácticas diseñadas para aumentar las habilidades para comprender las necesidades emocionales y de comportamiento de los estudiantes. Una persona adulta cuidadosa en la vida de un joven puede afectar en gran medida su vida. ¡Imagina el impacto que podría tener un adulto atento e informado!
Por Marta Seror
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